¿Sientes que el maquillaje, en lugar de favorecerte, acentúa tus arrugas o se ve «acartonado»? No estás sola. Con el tiempo, la piel cambia y lo que antes funcionaba ya no lo hace.
La buena noticia es que el maquillaje puede ser tu mejor aliado para verte y sentirte joven, sin necesidad de bases gruesas o contornos dramáticos. La clave está en una técnica simple: menos es más.
A continuación, te revelo 5 trucos para lograr un look fresco, luminoso y lleno de vida.
1. Prepara la piel, tu mejor lienzo
Para conseguir un maquillaje natural y minimalista par piel madura el primer paso es la hidratación, un primer gesto fundamental. Con los años, la piel tiende a resecarse, y el maquillaje se asienta en las líneas de expresión.
¿Qué hacer?
- Empieza con una buena crema hidratante y, si tienes, un sérum con ácido hialurónico. por ejemplo este de 6 péptidos y ácido hialuronico de COSRX todavía mejor.
- Esto no solo nutre tu piel, sino que también crea una barrera que hace que la base se deslice suavemente y se vea más natural.
2. Elige una base ligera y luminosa
Olvídate de las bases de alta cobertura. Se acumulan en las arrugas y dan un aspecto pesado y poco natural. Recuerda que tu objetivo es crear un maquillaje natural y minimalista en la piel madura.
¿Qué hacer?
- Opta por una BB Cream, CC Cream o una base de cobertura ligera a media.
- Por ejemplo Super skin tint de Maybelline
- Busca fórmulas con acabado satinado o luminoso. Esto difumina las imperfecciones y refleja la luz, dando un aspecto más fresco y radiante.
- Aplícala con una esponja húmeda o con las yemas de los dedos.
3. Resalta tus puntos de luz
El iluminador es tu nuevo mejor amigo. Usado correctamente, crea un efecto de luz natural que levanta y revitaliza tu rostro.
¿Qué hacer?

Aplica un iluminador líquido o en crema en puntos estratégicos:
- En la parte alta de los pómulos para un efecto lifting.
- En el hueso de la ceja para agrandar tu mirada.
- En el tabique y punta de la nariz para estilizarla.
- En el arco de cupido (la V del labio superior) y mentón para dar volumen.
El iluminador que os recomiendo es este de Kiko Milano. Este iluminador en polvo ultrafino, viene en un envase muy elegante, funde con la piel dejando un acabado luminoso y natural que realza las facciones. Su textura ligera permite modular la intensidad, logrando desde un resplandor sutil de día hasta un brillo más marcado de noche.
4. Pestañas y cejas, el marco de tu mirada
Con los años, las pestañas y cejas pueden volverse más finas. Enmarcar tu mirada es clave para un rostro más expresivo y joven.

¿Qué hacer?
- Pestañas: Usa un rizador para abrirlas y una máscara que dé volumen sin apelmazar.
- Cejas: Rellénalas con un lápiz como este o una sombra del mismo color que tu vello. No las hagas muy oscuras ni marcadas, un trazo suave y difuminado es suficiente para darles forma.
5. Labios con brillo y color
Un toque de color en los labios puede transformar tu look en segundos.
¿Qué hacer?
- Elige labiales cremosos o con acabado satinado.
- Evita los labiales mate de larga duración, que tienden a resecar y acentuar las líneas.
- Si quieres delinear, usa este perfilador de Kiko Milano un color similar al de tu labial para un efecto natural. Un poco de brillo en el centro de los labios dará un efecto de volumen instantáneo.
- Puedes probar con este de Kiko Milano. Es un Bálsamo hidratante con color que aporta un toque de color delicado y brillante a los labios, su fórmula está enriquecida con Vitaminas A, E y C, y con manteca de karité de acción emoliente. Tiene una textura cremosa y cómoda, como una suave caricia en los labios.
Conclusión
El maquillaje no es una máscara, es una herramienta para realzar la belleza que ya tienes. Con estos trucos sencillos, verás cómo tu rostro se ilumina, se ve más descansado y refleja toda la sabiduría y confianza que has ganado con los años.
¿Qué truco vas a empezar a aplicar hoy mismo?