La santísima trinidad para la piel madura Vitamina C, Ácido Hialurónico y Retinol, activos clave para una rutina de día y noche.
¿Sientes que tu piel ya no es la misma? ¿Que ha perdido esa vitalidad y firmeza de antes? A medida que cumplimos años, los cambios hormonales y el paso del tiempo afectan a la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico, que son el andamiaje natural de nuestro rostro.
Pero no te preocupes. No necesitas una colección interminable de cremas. La clave está en ser estratégica y utilizar los ingredientes que realmente funcionan. Por eso, te presentamos a la «Santísima Trinidad» del cuidado facial, un trío de activos que, en consecuencia, transformarán por completo el aspecto de tu piel.
Te vamos a guiar para usar Vitamina C, Ácido Hialurónico y Retinol como activos clave para una rutina de día y noche
1. Vitamina C: El escudo antioxidante y la dosis de luz
¿Qué es? La vitamina C es un potente antioxidante que combate los radicales libres, esas moléculas que aceleran el envejecimiento.
¿Por qué es crucial a partir de los 40? Con la edad, la piel se vuelve más vulnerable al daño solar y la contaminación. Además, la vitamina C no solo protege tu piel, sino que también estimula la producción de colágeno y ayuda a unificar el tono, reduciendo las manchas. En definitiva, el resultado es un rostro más luminoso, firme y uniforme.
¿Cómo incorporarla a tu rutina? Úsala por las mañanas, después de la limpieza y antes de la crema hidratante y el protector solar. Un sérum de vitamina C es la forma más efectiva de aplicarla.
Personalmente me gusta este serum de Nacomi. Este sérum facial concentrado compuesto por 3 formas de vitamina C reduce las arrugas, unifica el tono de la piel y devuelve el aspecto radiante a la piel cansada y apagada.
La fórmula ayuda combate el acné, fortalece los vasos sanguíneos y estimula la síntesis de colágeno. La vitamina C, como fuerte antioxidante, reduce los radicales libres y ralentiza el proceso de envejecimiento .El potenciador facial enriquecido con aceite de rosa mosqueta y aceite de almendras además reafirma y suaviza la piel, aclarando decoloraciones persistentes.
2. Ácido Hialurónico: La hidratación profunda que rellena arrugas
¿Qué es? Es una molécula que nuestro cuerpo produce de forma natural y que es capaz de retener miles de veces su peso en agua. Imagina una esponja gigante que mantiene la piel hidratada, jugosa y rellena.
¿Por qué es crucial a partir de los 40? A medida que envejecemos, la cantidad de ácido hialurónico en nuestra piel disminuye drásticamente, lo que provoca la pérdida de volumen y la aparición de arrugas y líneas de expresión. Por esta razón, usarlo de forma tópica es la mejor manera de rehidratar la piel en profundidad y conseguir un efecto relleno y alisador visible.
¿Cómo incorporarlo a tu rutina? Puedes usarlo tanto por la mañana como por la noche, siempre sobre la piel ligeramente húmeda para que pueda absorber mejor el agua. Se aplica después de la limpieza y antes de otros sérums o cremas.
Este es el yo uso de la marca Nacomi, es un sérum basado en un complejo compuesto por 4 formas de ácido hialurónico de diferentes tamaños y propiedades. Penetra en la piel garantizando una hidratación en múltiples niveles. La fórmula enriquecida con OptimHyal alisa las arrugas, hidrata y hace que la piel se vuelva más elástica.La glicerina incluida en la composición potencia el efecto de hidratación.Indicado para pieles secas y pieles flácidas con signos visibles de la edad.
3. Retinol: El renovador nocturno para una piel lisa y joven
¿Qué es? Es un derivado de la vitamina A que acelera la renovación celular. De hecho, es considerado el ingrediente más efectivo contra el envejecimiento, ya que trabaja directamente sobre las arrugas, manchas y textura de la piel.
¿Por qué es crucial a partir de los 40? Nuestra regeneración celular se vuelve más lenta. Por eso, el retinol le da un «empujón» a ese proceso, alisando las arrugas, reduciendo las manchas de la edad y mejorando la firmeza. Es la máquina del tiempo de tu piel.
Atención: La importancia de la adaptación. El retinol es un ingrediente muy potente. Un porcentaje alto, por ejemplo, el 1%, puede causar estragos e irritación si tu piel no está adaptada. Por lo tanto, es fundamental empezar con una concentración baja e ir aumentando de forma gradual. En conclusión, la paciencia es tu mejor aliada.
Aunque el retinol es un ingrediente estrella en el cuidado de la piel, su potencia puede ser excesiva para algunas personas, causando irritación y sensibilidad. Para ellas, el bakuchiol emerge como la alternativa perfecta. Conocido como el «retinol natural», este extracto de origen vegetal ofrece beneficios antienvejecimiento similares, como la mejora de la elasticidad y la reducción de líneas de expresión, pero sin los efectos secundarios del retinol. Su fórmula suave lo convierte en el aliado ideal para pieles sensibles, reactivas, secas o incluso para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. Incorporar el bakuchiol en la rutina de cuidado facial es la clave para obtener una piel más lisa y firme de manera segura y respetuosa.
Aquí tenéis varios tipos de retinol según la adaptación de vuestra piel:
- NACOMI NEXT LEVEL BE LIKE PHOENIX RETINOL 1% 30ML para pieles ya acostumbrada al retinol.
- NACOMI NEXT LEVEL BE LIKE PHOENIX RET. 0,5% 30ML para las pieles que comienzan a usarlo o son un poco sensibles.
- NACOMI NEXT LEVEL RET0,35%+BAKUCHIOL1% SERUM 30ML para pieles sensibles, reactivas, secas o incluso para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
Bonus: Mi secreto personal para potenciar los resultados
Por último, antes de aplicar cualquier sérum o activo, existe un paso que personalmente considero esencial: el uso de un sérum de péptidos. Los péptidos son cadenas cortas de aminoácidos que le «dicen» a tu piel cómo comportarse. Son como pequeños mensajeros que le indican a tus células que produzcan más colágeno y elastina.
Yo utilizo este de Nacomi y los uso justo después de la limpieza y antes de aplicar el resto de activos para preparar la piel y potenciar el efecto de los demás productos. Es un paso extra que marca una gran diferencia.
Así es como puedes integrar estos activos en tu rutina
Ahora que conoces el poder de la Santísima Trinidad (y mi secreto mejor guardado), te muestro cómo organizarlos en una rutina de día y de noche para conseguir los mejores resultados. La clave es la constancia, el orden de aplicación y, en el caso del retinol, una alternancia inteligente.
Rutina de Mañana (rápida y eficaz):
- Limpieza suave.
- Sérum de péptidos (Extra de hidratación)
- Sérum de Vitamina C.
- Crema hidratante con SPF 50 y un toque de color.
Rutina de Noche:
La clave está en alternar tus activos potentes para evitar la irritación. Mi recomendación es usar Retinol y Niacinamida en noches diferentes. La niacinamida es un ingrediente fantástico que fortalece la barrera de la piel, minimiza los poros y calma las rojeces. Es el complemento perfecto para las noches en las que no usas retinol, ayudando a que tu piel se recupere y se mantenga fuerte.
- Noche 1: Noche de Retinol
- Doble limpieza.
- Sérum de péptidos (BONUS).
- Sérum de Ácido Hialurónico.
- Retinol.
- Crema hidratante con ceramidas.
- Noche 2: Noche de Niacinamida
- Doble limpieza.
- Sérum de péptidos (BONUS).
- Sérum de Ácido Hialurónico.
- Niacinamida.
- Crema hidratante con ceramidas.
Importante: La alternancia entre retinol y niacinamida te permite beneficiarte de ambos sin comprometer la salud de tu piel. Las ceramidas en tu crema nocturna sellan la hidratación y fortalecen la barrera protectora de la piel, algo fundamental, sobre todo cuando se usan activos potentes.
Conclusión:
Verte joven no es solo cuestión de edad, es de sabiduría. Al elegir estos tres ingredientes, estás apostando por la ciencia que funciona. Con un poco de constancia, notarás cómo tu piel recupera su vitalidad y se vuelve más luminosa, firme y radiante que nunca.
¿Has probado ya Vitamina C Ácido Hialurónico y Retinol en tu rutina diaria?